Matías Alemanno tuvo una doble satisfacción en el cierre del Super Rugby. Pudo volver a jugar tras la lesión en el tobillo y participó activamente de la victoria de los Jaguares frente a Lions en la última fecha de la primera fase.

Por eso, al igual que el resto del plantel, fue destinatario de la ovación que le tributó el público de Vélez en la despedida de la temporada para la franquicia argentina.

«El equipo siempre tuvo actitud de jugar, de ir para adelante. Más allá de los rivales, la diferencia, el equipo siempre se mantuvo de pie, siempre fue para adelante a pesar de la adversidad. Yo me quedo con eso», señaló el segunda línea surgido de La Tablada.

Al igual que muchos de sus compañeros, Alemanno lamentó no haber podido clasificarse a los cuartos de final del Super Rugby. «Esperábamos otra cosa, poder clasificar a los play-offs con esa ilusión que teníamos de que contábamos con un buen equipo. Veníamos de salir cuartos en un mundial y la base de jugadores iba a ser la misma, así que tal vez un poco frustrados por eso».

Por último, se refirió al crecimiento personal que experimentó al ser parte del primer equipo profesional argentino que participó del torneo más espectacular del planeta. «Es el rugby más exigente del mundo. Velocidad, dinámica, potencia, destrezas increíbles. De eso no hay duda. «Como jugador aprendí muchísimo. Desde los entrenadores nuestros hasta jugar contra los otros equipos. Este es un torneo lleno de estrellas y cracks, es imposible no crecer como jugador en este nivel. Impresionante».

Foto: Prensa Jaguares